El Mikhailovsky Theatre acoge una exposición de la fotógrafa teatral Natalia Voronova.
Voronova filmó las imágenes detrás de escena de algunas de las producciones del Ballet Mikhailovsky en donde se lucen las producciones de ballet más exquisitas de los grandes clásicos, incluyendo Giselle, Swan Lake y Cinderella.
«Para mí, fotografiar ballet es una fuente de alegría e inspiración», comenta Voronova sobre la exposición. «Capturar con éxito un momento que dura solo una fracción de segundo es uno de los desafíos más interesantes que enfrenta un fotógrafo. El escenario se abre frente a usted aquí en un ángulo inusual, y el mundo detrás de las escenas no es menos apasionante. ¿Qué debería capturar? ¿Y cómo te mantienes invisible en el proceso, sin quemarte accidentalmente en un foco de luz caliente o interponiéndote entre el escenario y la escena, manteniendo la cámara inadvertida mientras observas cuándo se produce un cambio de escena y no lo bloquea? La otra cosa fascinante de la fotografía de ballet es que el ballet es un lenguaje universal que todos pueden entender. Con la respuesta que recibo de los fanáticos del ballet en todo el mundo, comprendo cada vez más que esta es una forma de arte que conmueve a todos «.
Natalia Voronova encontró su camino en la desafiante profesión de la fotografía teatral a través de las áreas tras bambalinas de los mas importantes tatros de Rusia, el Bolshoi y el Mariinsky.
Su cámara ha capturado imágenes del Dance Open, a grandes bailarinas como Diana Vishneva y los festivales de Gala del Kremlin, del Boris Eifman Ballet Theatre.
