El museo de arte Kunsthalle de Bielefeld presenta en estos meses (del 17 de noviembre de 2013 al 2 de marzo de 2014) una fascinante muestra dedicada al arte textil contemporáneo, desde la época del movimiento arquitectónico Bauhaus hasta nuestros días (catálogo de editorial Kerber/Bielefeld).
«Arte y textiles desde Bauhaus hasta hoy – to open eyes» se titula la exhibición que reúne obras de creadores como Benita Koch-Otte, Sonia Delaunay, Anni Albers, Gunta Stölzl, Marie Laurencin, Blinky Palermo, Alighiero e Boetti, Sigmar Polke, Olaf Nicolai, Aiko Tezuka, Sergej Jensen, Erzen Shkololli y muchos otros.
Riqueza
La materia es tan rica en historia, evolución, creatividad, estructuras y estilos que sobre el tema podrían realizarse al menos tres exposiciones sucesivas, afirma el director de museo, Friedrich Meschede. La exhibición coincide con la conmemoración del 800º aniversario de Bielefeld como centro especializado en la producción de telas de lino. Antes de trabajarse el algodón en el siglo XIV y hasta el XVIII, el lino era en Europa la fibra textil más importante después de la lana. Los gremios de tejedores de lino alcanzaron, tras la fundación de las ciudades alemanas, extraordinario auge y poder.
Arte textil
Desde la creación de la escuela de artesanía, diseño, arte y arquitectura Bauhaus, fundada en 1919 por Walter Gropius en Weimar (Estado de Turingia) y cerrada en 1933 por el régimen nazi de Adolf Hitler, la artesanía textil ha pasado a convertirse en género artístico con vida propia. Alfombras y tapices son concebidos desde entonces no sólo como productos manufacturados, sino como obras de diseño cognitivo-conceptual.
El amplio espectro de aproximaciones al tema textil entre el siglo XX y el XXI abarca desde el estudio del arte ornamental no europeo, pasando por la investigación de los colores, hasta el cuestionamiento de la materialidad y del tratamiento irónico y crítico de telas y tejidos.
Antecedentes
En primer término la exposición aborda los bocetos ornamentales de la comunidad de producción de artistas plásticos Wiener Werkstätte (fundada en 1903 por el arquitecto austríaco Josef Hoffmann, el banquero Fritz Wärndorfer y el pintor Koloman Moser) que recoge los éxitos de la Secesión Vienesa de finales del siglo XIX que integraban Gustav Klimt, Joseph Maria Olbrich, Max Kurzweil, Josef Engelhart, Ernst Stöhr, Wilhelm List, además de Moser y Hoffmann y otros artistas; más adelante deslumbran los diseños textiles de Sonia Delaunay y Marie Laurencin, entre otros, así como las propuesta de las artistas de Bauhaus, principalmente Anni Albers, quien mantenía una estrecha relación de amistad con el arquitecto Philip Johnson que planeó el museo Kunsthalle de Bielefeld.

Frühsommer (Aufgabe 86), o. J., Aquarell, 11 x 15 cm, Kunsthalle Bielefeld, Inv.-Nr. C 751; Foto: Ingo Bustorf
Bauhaus
Un aspecto central de la muestra son los trabajos de la artista de Bauhaus Benita Koch-Otte (Stuttgart, 1892 – Bielefeld, 1976), quien dirigió durante 20 años los talleres textiles de importantes fundaciones de esta ciudad hasta después de la Segunda Guerra Mundial. En las décadas de 1920 y 1930 «nos encontrábamos en diálogo con dos amantes de la misma cuestión, se trataba del lino y del índigo, de tejer e hilar», evoca Koch-Otte. La mudanza de Bauhaus a Dessau (Estado de Sajonia- Anhalt) a comienzos de 1925, y con la que no todos los profesores y estudiantes estaban de acuerdo, trajo muchos cambios consigo para el arte textil. Hasta la apertura del nuevo edificio en diciembre de 1926 el funcionamiento de esta sección experimentó una gran transformación en aspectos pedagógicos, económicos y hasta de personal docente, que se vió mermado. En comparación con Weimar, los tapices creados en Dessau experimentaron también cambios, sus motivos eran más apagados debido a la utilización de menos tonalidades de colores.
Legado
Pero la exhibición abarca asimismo obras de las décadas de 1960 y 1970, entre otras de Blinky Palermo, Alighiero e Boetti y Sigmar Polke, hasta las posiciones de artistas contemporáneos como Olaf Nicolai, Aiko Tezuka, Sergei Jensen y Erzen Shkololli, quienes redescubren la artesanía textil, la vuelven a investigar y experimentan con ella nuevas formas de expresión.
Andy Warhol creó para una empresa de Milán, con la que pensaba firmar un contrato publicitario, una serie de serigrafías sobre lienzo titulada “Yarn Painting” (1983). El negocio no salió pero ahí quedaron los trabajos, exhibidos también en esta muestra, que parecen con marcas de costuras y que se corresponden un poco con las líneas trazadas en su bordado a máquina (seda sobre organza) por Marianne Meyer-Weissgerger (1910-1991), docente de la Escuela Superior de Artes Plásticas de Berlín.
Arte originario
Nuestra civilización pende de hilos de seda, lana, lino o algodón. El arquitecto alemán y teórico del arte Gottfried Semper (Hamburgo, 1803 – Roma, 1879) denominaba en 1860 el arte textil como «arte primigenio», porque todas las demás artes han tomado prestados de ella sus «tipos y símbolos».
Hartmut Böhme (Beeskow, 1944), catedrático de teoría de la cultura de la Universidad Humboldt de Berlín profundiza aún más en esta reflexión. «No puede haber cultura donde los lazos y el anudamiento no han sido dominados desde el punto de vista técnico-cultural. La concatenación cultural primigenia de las cosas parte de las técnicas textiles».
Página de internet: www.kunsthalle-bielefeld.de

Jacquard Wandbehang, 1927/28
Wolle, Baumwolle, Seide, 229 x 142 cm, St. Annen Museum, Lübeck, © St. Annen-Museum – Fotoarchiv der Hansestadt Lübeck